LA REVENTA INFORMAL DE MINUTOS

‘Minutos a celular: pan de unos quiebra de otros’[1]


Colombia presentó una tasa de desempleo del 11.2% en julio de 2007, menor que la de julio de 2006 que fue 12.5%[2]. Con cifras bastantes significativas aunque no del todo alentadoras porque lo que realmente importa es que la tasa de desempleo disminuya, y que la tasa de participación aumente lo cual no ocurrió pues la tasa de ocupación observada en julio de 2007 fue 50.7% frente a 52.3% registrada en julio de 2006. Eso quiere decir que estas cifras para lo único que nos sirven es para crearnos un paradigma. Nuestro país se está llenado cada vez más de desempleados y campesinos sin trabajo los cuales tienen que recurrir al rebusque del trabajo informal. El trabajo informal, se puede decir, se puso de moda, algunos aseguran que obtienen más ganancia y una mejor flexibilidad en cuanto a horarios, que lo hacen parecer la mejor opción frente a otros trabajos que requieren mayor esfuerzo. Por eso este trabajo atrae a mas de uno, llenando el espacio publico con diferentes variedades de mercancías como ropa, cd’s, películas y minutos a todos los operadores de teléfono móvil a precios bastante bajos incluso menores que los planes postpago que estos operadores nos ofrecen.

El impacto que generan los vendedores informales de minutos en la economía afecta en especial a las compañías de telefonía móvil y a las leyes que se han implementado para regularlos. Desde que se empezó a ver este fenómeno por las calles de nuestra ciudad son muchos los aspectos, criticas, y demas factores que se han generado frente a ellos, incluso son considerados como ladrones. Se busca que el gobierno tome cartas sobre el asunto para tratar de erradicarlos o almenos controlarlos.

Aunque no parezca, estos vendedores por tener ventas entre los 200 y 1000 pesos, mueven una gran cantidad de dinero. Según el DANE, la participación de los vendedores informales en la economía colombiana se ha incrementado en los últimos años, pasando de un 5.74% a un 5.96% en la participación del PIB. Como lo asegura el senador Luis Fernando Velasco del partido liberal, son cinco billones quinientos mil millones de pesos en perdidas al año, cifras que superan las demás economías latinoamericanas como la de Brasil, México y Chile. Si para algunos este negocio les resulta una ganancia, para otros les resulta solo perdidas y contratiempos. Porque puede que los operadores les vendan planes de grandes cantidades de minutos. Para empezar los vendedores informales de los minutos deciden sacar estos planes con identificaciones falsas, lo cual en el momento del cobro no deja a ningún responsable frente a la línea.En segundo lugar estos vendedores bloquean y congestionan la plataforma, ya que los celulares mantienen en un constante uso con un promedio entre 45 y 60 llamadas diarias según el ministerio de comunicaciones, lo que una persona corriente no utiliza.
En cuanto a las cifras, vemos a la empresa Ola con perdidas de mas de 200.000 millones de pesos; Movistar, que en su historia desde Celumovil tiene las mayores perdidas acumuladas con mas de un billón de pesos; y Comcel con casi los dos billones de pesos en perdidas, es el preferido por los vendedores ambulantes, pues según ellos dan las mejores tarifas y el mejor margen de ganancia. No podemos olvidar tambien ciertos rumores sobre la doble moral que tiene Comcel por ofrecer y dejar activos estos planes que se saben van destinados a estos vendedores, mostrando por otro lado quejas, reclamos y oponiéndose a la legalización de este trabajo informal, pues se sienten supuestamente afectados.

‘Aproveche esta super oportunidad!! Venda minutos cualquier operador $130 pesos el minuto costo. Sin contratos, sin fechas de vencimiento, sin data créditos... POR POCOS DIAS!!. También puede hacer llamadas internacionales desde $55 pesos minuto. Llame y en Bogota 2 173652- 2 173643 - 3 220389’[3]’’.
Otra parte que también se ve bastante afectada son las cabinas telefónicas. Estos pequeños negocios ven en la reventa de minutos una competencia desleal. El servicio de comunicación a destinos nacionales, internaciones y todos los operadores de telefonía móvil que los revendedores ofrecen no tiene que cubrir gastos varios como arrendamiento, pago de impuestos, pagos saláriales o nomina. Por tal razón el servicio que brindan los revendedores de minutos a pesar de no ser el mejor es el menos costoso y tiene la ventaja de poderse encontrar en cualquier esquina.

Montarle la competencia a las cabinas telefónicas se está volviendo tan fácil que incluso en Internet con solo poner la palabra minutos en un buscador aparecen ofertas, prometiendo a cualquier persona convertirse fácilmente en un revendedor informal de minutos, presentando como único requisito una cedula de ciudadanía.

Las leyes que regulan a estos vendedores ambulantes no han tenido buen control, implementación y actualización, la única conocida que los reglamenta como vendedores informales de minutos es la ley 1032 de 2006 la cual dice : ‘Artículo 257. De la prestación, acceso o uso ilegales de los servicios de telecomunicaciones. El que, sin la correspondiente autorización de la autoridad competente, preste, acceda o use servicio de telefonía móvil, con ánimo de lucro, mediante copia o reproducción de señales de identificación de equipos terminales de estos servicios, o sus derivaciones’. A pesar de que la ley es clara en decir que es una autoridad competente (Ministerio de Comunicaciones) la única en autorizar la explotación del negocio de la telefonía móvil con animo de lucro y el no cumplimiento de esta implica sanciones desde prisión de cuatro (4) a diez (10) años y una multa de quinientos (500) a mil (1.000) Salarios mínimos legales mensuales vigentes. En realidad el problema no es la ley o la reglamentación para este tipo de negocios informales, sino la aplicación que las autoridades deben hacer cumplir a quienes incumplan o se beneficien de esta práctica ilegal.

Por otra parte, ¿qué sería de la vida de estos vendedores informales sino consiguieran el sustento diario por medio de la reventa de minutos? . Esta es una pregunta que vale la pena responder. Sin embargo, mientras exista la necesidad de comunicación donde esta sea una oportunidad de negocio para los vendedores informales este oficio se mantendrá y si adicional a esto las leyes no se aplican, simplemente seguirán existiendo incluso apareciendo vendedores o intermediarios para la venta de minutos en la comunicación por telefonía móvil. Si a este situación se le añade un escenario nacional con un índice de desempleo alto para el país en donde son pocas las oportunidades de empleo formal, las personas optarán por la ‘’ley’’ del rebusque a fin de cumplir con las necesidades de su familia que dependen directamente de ellos.
En el mercado de las comunicaciones existen tres agentes que compiten directamente. El primero son los operadores de la telefonía móvil quienes les interesa vender el servicio de comunicación y tienen como respaldo toda una infraestructura tecnológica que les permite conformar algunos planes masivos de venta de minutos. El segundo agente, son los vendedores informales de minutos que, aprovechando estos planes masivos de minutos y con una alta rentabilidad sin el pago de los impuestos de un negocio formalmente establecido, asumen el riesgo de ofrecer la comunicación de telefonía móvil celular por minuto.
Las anteriores proponen soluciones, por ejemplo los operadores buscan que estos vendedores se vuelvan parte de las cabinas telefónicas, pagando arriendo, servicios y que se registren en Cámara de Comercio como su única razón social. Pero los vendedores ambulantes opinan que los legalicen y los carneticen para seguir en la calle, ya que el margen de ganancia entre lo que compran y lo que venden es bastante atractivo para sus intereses económicos donde no va a ser el mismo si se vinculan a una cabina, obteniendo menos ingresos, llevándolos a buscar mas dinero por otras fuentes que puede agravar otros problemas como vandalismo, robos, corrupción y drogas.

El negocio de la comunicación por telefonía móvil celular a través de la venta informal de minutos es un negocio altamente atractivo ya que es fácil de instalar. No requiere ningún requisito especial. Tiene alta rentabilidad y no necesita una inversión costosa como locales, sistemas de comunicación, infraestructura, y tecnología entre otros.
La venta de minutos se convirtió en una opción para conseguir ingresos para los más necesitados: las madres cabezas de hogar, desplazados y desempleados en general.

¿De que forma esta interviniendo el gobierno para solucionar esta situación?, es algo que no se ve muy claro, pues vemos que este trabajo informal va en aumento, y mientras no exista una reglamentación más estricta y las autoridades no la apliquen, este negocio se mantendrá de manera visible en todos aquellos puntos donde las personas requieran comunicación.
[1] http://comunicaciones.udea.edu.co/dlud/index.php?option=com_content&task=view&id=1261&Itemid=5
[2] http://web.presidencia.gov.co/sp/2007/septiembre/01/dane.pdf
[3] http://www.adoos.com.co/post/1712659/venda_minutos_legales_a_cualquier_operador_de